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Los falafels son una de las recetas más populares de Oriente Próximo. Se trata de una especie de croquetas hechas con garbanzos o habas que también encontramos habitualmente en los kebabs. A mi me encantan pero, reconozcámoslo, los que encontramos en Kebabs o puestecitos turcos no acostumbran a ser super saludables… Por eso prefiero hacerlos en casa, así controlo todos los ingredientes y además quedan deliciosos!
Personalmente me gusta la receta tradicional, así que verás que utilizo los ingredientes básicos de toda la vida. Lo único diferente es que los hago al horno. Particularmente me gustan mucho cocinados así, pero te lo advierto, la textura cambia ligeramente ya que no quedan tan crujientes ni jugosos. Aún así están riquísimos y son más saludables. Además ahorro en aceite!!! Nunca cocino con aceites refinados así que entenderás que me duela un poco gastar grandes cantidades de aceite de oliva virgen extra para freír… Además, con la versión horneada también puedo omitir el pan rallado y la harina. En definitiva, menos ingredientes, más rápido, más fácil y ensucia menos! Sin embargo, si te gustan más fritos, adelante! También los puedes cocinar así, pero recuerda, los fritos que sean ocasionales, no diarios! Y sobretodo, evita los aceites refinados.
En relación a los garbanzos tienen que ser crudos, no sirven los de bote que ya vienen cocinados. Te quedaría una masa demasiado húmeda e imposible de trabajar.
Otra cosa a tener en cuenta es que si no eres muy fan del cilantro fresco puedes reducir la cantidad a un cuarto de taza y el sabor se notará mucho menos, pero te recomiendo que no lo elimines del todo porque es uno de los ingredientes que aporta más personalidad. Yo prefiero que se note porque me encanta!
Las cantidades son para unos 16 falafels de unos 30 gramos cada uno. Aparentemente una ración son 4 falafels, por lo que tendrías 4 raciones. Honestamente, yo suelo comerme 6 unidades, pero te advierto que tengo bastante saque. Si quieres hacer más unidades para congelar y así tenerlas para otros días dobla las cantidades y te saldrán unos 32. Eso es lo que hago yo, y la verdad, lo prefiero porque así me duran meses y ya que enciendo el horno, aprovecho! Hay que ser eficiente 😉
Puedes comerlos con pan de pita, con humus, con una ensalada, con salsa tahini, salsa de yogur de soja… Hay infinidad de opciones! Echa un vistazo a la sección “dips y salsas” para coger algunas ideas 😉 (la de la foto es salsa de Tahini).
¡Estoy deseando que me cuentes cómo te han quedado y si te han gustado tanto cómo a mi!
- 250 gr de garbanzos crudos previamente remojados en agua junto con una c.s. de bicarbonato durante 12-24 horas (si pueden ser 24h., mejor).
- 1,5 cebollas
- 1 diente de ajo (sin el nervio)
- ½ taza de perejil fresco (unos 20 gr). Sólo las hojas, descarta los tallos.
- ½ taza de cilantro fresco (unos 20 gr). Sólo las hojas, descarta los tallos.
- 1 c.p. de comino molido
- 1 c.p. de cilantro molido
- ½ c.p. de sal
- Pimienta negra al gusto
- 1 c.p. de bicarbonato (recomendable) + 1 c.s. para el remojo
- ½ c.p. de cayena molida (opcional)
- Pon los garbanzos en remojo en abundante agua y con 1 c.s. de bicarbonato durante 12-24 horas.
- Pon los garbanzos bien escurridos en un procesador de alimentos junto con las cebollas, el ajo, el perejil y el cilantro. Triturar.
- Añadir el resto de ingredientes (comino, sal, pimienta, bicarbonato, cayena) y mezclar con la ayuda de una cuchara o con las manos.
- Dejar reposar la masa 30 minutos (si hace mucho calor en nevera, sino a temperatura ambiente).
- Dar forma a las bolas, pueden ser redondas tipo albóndigas o ligeramente aplastadas.
- Precalentar el horno a 200ºC con calor por arriba y por abajo.
- Colocar los falafels en una bandeja de horno con papel de hornear. Podéis pincelarlos con aceite de oliva virgen extra para que queden más dorados.
- Hornear 20 minutos en total (10 minutos cada lado).
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